sábado, 19 de noviembre de 2011

Cómo hacer una monografía

Cómo hacer una monografía

           

INTRODUCCIÓN
Frecuentemente se da la situación en la que un profesor solicita a sus alumnos la redacción de una monografía, dando por sentado que ellos ya saben cómo hacer el trabajo. Sin embargo, en general, en el nivel de estudios secundarios y a veces terciarios, no se proveen de las herramientas básicas para la tarea. Los estudios teológicos tampoco escapan a esta realidad. Es por ello que, con el fin de solucionar el problema, a continuación ofrecemos las nociones básicas para que el alumno sepa COMO HACER UNA MONOGRAFIA.

1. ¿QUE ES UNA MONOGRAFIA?
Se puede definir como la redacción de un tema específico de una ciencia o campo del conocimiento. En el ámbito de los estudios de nuestras especialidades puden ser: El aborto en las adolescentes, Las propiedades curativas del rocoto, Efectos de las películas 3D, turismo en el Cañón del Colca, La minería informal.
2. ¿QUÉ PASOS HAY QUE DAR?

2.1. Elegir el tema.
Este es el primer paso. Es muy importante porque de él depende en gran medida el éxito y valor del trabajo a realizar. Si la monografía no es solicitada específicamente por el profesor, entonces es el alumno quien debe elegir el tema. En tal caso, ¿cómo proceder?
Sugerimos varios caminos a seguir.

2.1.1 Examinar experiencias personales. Puede ser por ejemplo la motivación por la que se eligió la especialidad, curiosidad por un tema,etc..
 2.1.2 Averiguar qué temas se han investigado recientemente sobre los cursos de especialidad. Para ello podemos recurrir a revistas especializadas, de las cuales debemos estar suscritos o ser asiduos lectores.

2.1.3 Pensar sobre la diversa problemática que existe en el campo de acción de nuestra especilidad.
2.1.4 Dialogar con profesores o especialistas en el campo a investigar.

3. ¿CÓMO DELIMITAR EL TEMA?
Tan importante como la elección del tema es su delimitación. Si no ajustamos bien el tema no sabremos adónde apuntamos ni tampoco sabremos cuándo terminaremos. De mayor a menor se trata de:

Tema general
            Sub-tema
                        Monografia

Ejemplo: Tema general: El aborto
              Sub-tema: El aborto en las adolescentes
                              Monografía: Indice del aborto en las adolescentes en la región Arequipa
Ejemplo: Tema general: el divorcio
                        Sub-tema: El divorcio en la Biblia
                                   Monografia: El divorcio en la enseñanza de Mateo 19.1-12

Ejemplo: Tema general: El turismo
                        Sub-tema: El turismo en el Cañón del Colca
                                               Monografia: Turismo vivencial en el Cañón del Colca

4. HACER UN BOSQUEJO TENTATIVO
Escribir una monografía, elaborar un trabajo de investigación o escribir una tesis es como edificar una casa. Lo primero que tenemos que hacer es contar con el terreno y luego tener una idea aproximada del espacio que queremos construir: 2 o 3 dormitorios, cocina, living, etc. El bosquejo tentativo sería una especie de plano de construcción que nos da el marco general del trabajo a realizar. Luego, vamos levantando las paredes, que serían los contenidos propios de cada parte. En realidad, el producto final (la casa terminada) no sabemos realmente como va a quedar. En la última parte de la construcción se nos puede ocurrir cambiar la fachada del edificio y ponerle piedra en lugar de ladrillo visto. Así sucede con la monografía, lo primero que necesitamos, después de elegir el tema y delimitarlo es hacer un bosquejo o esqueleto básico.
En ese bosquejo tenemos que poner divisiones mayores del tema y divisiones menores. Estas últimas, sólo en el caso de que se nos ocurriera, ya que a esta altura del trabajo es difícil que tengamos tantos datos como para hacer esas divisiones menores.

5. RECOPILAR INFORMACIÓN
En esta etapa de la tarea nos dedicamos a reunir información sobre el tema a tratar. Para ello recurrimos a:
5.1. Archivos de bibliotecas
5.2. Bibliografías sobre el tema a estudiar
5.3. Hojear revistas que traten el tema
5.4. Observar artículos en diccionarios y enciclopedias
5.5. Consultar a profesores o especialistas en la materia.
5.6. Hacer un listado de personas a las cuales podríamos entrevistar para recabar información, en el caso de que la modalidad de la monografía lo permita. Por ejemplo si se trata de un estudio histórico de una denominación, debemos pensar en personas que tuvieron relación directa con los fundadores de la misma.


6. PREPARAR FICHAS O APUNTES
Este paso consiste en leer las fuentes disponibles, haciéndolo con criterio, es decir, siguiendo ciertas pautas básicas:
6.1. Extractando el contenido que deseamos utilizar.
6.2. Resumiendo el contenido en nuestras propias palabras.
6.3. Escribiendo críticas breves que no queremos olvidar a la hora de redactar la monografía.

OBSERVACION: Cuando las citas que extraemos del contenido son directas, hay que copiarlas entre comillas y con exactitud, sin agregar ni quitar nada. Si deseamos omitir alguna oración de la cita que extraemos tenemos que colocar el siguiente signo entre corchetes: [...] y luego continuar la cita.

7. ORGANIZAR LOS DATOS RECOGIDOS
Ahora corresponde organizar los contenidos extraídos. Para ello, tenemos que revisar y ampliar el bosquejo tentativo y colocar claves de las citas que queremos hacer en cada una de las subdivisiones del bosquejo.

       Ejemplo:
       1. Turismo
           1.1 Turismo histórico
           1.2 Turismo de aventura
           1.3 Turismo vivencial
           1.4 Turismo gastronómico

8. ESTRUCTURA DE LA MONOGRAFIA
Toda monografía tiene una estructura que consiste en:
8.1. Portada: donde va el título, el autor, a quien es presentada, la materia a la que corresponde, la facultad o seminario, la ciudad y la fecha (ver ejemplos en apéndices).
8.2. Introducción: donde se indica el tema, el propósito, circunstancias que llevaron a elegirlo, lo que se quiere demostrar y otros elementos que tienen que ver con aspectos introductorios del tema.
8.3. Indice: títulos y subtítulos con las páginas donde comienzan.
8.4. Cuerpo: donde se desarrolla el tema.
8.5. Conclusión: la página o las páginas donde se remata el trabajo y donde se resume la investigación sin agregar nuevos datos.
8.6. Notas: Si las notas con citas de las obras, comentarios, etc. no son ubicadas al pie de página, son escritas después de la conclusión bajo el titulo NOTAS. Cada nota lleva un número correlativo.

IMPORTANTE: Todo contenido o pensamiento que no sea nuestro, debe ser consignado como cita directa del autor que hemos consultado. De otro modo estamos plagiando contenidos los que hacemos pasar como propios. Cuando la cita que consignamos es breve (hasta tres renglones) van en el mismo texto de la monografía, entre comillas. Si la cita tiene más de tres renglones, va aparte, con sangría de 4 espacios y a un renglón, mientras el texto de la monografía se escribe en páginas de tamaño carta y a DOBLE ESPACIO.  

8.7. Apéndices: Para el caso cuando ciertos aspectos de la monografía no los hemos ubicado dentro del texto porque nos parecía que no correspondía en ese lugar. Ejemplo: “El divorcio según los padres de la Iglesia”, podría ser un apéndice para el tema: “El divorcio en las enseñanzas de Jesús en Mateo 19.”

8.8. Bibliografía:
La bibliografía debe incluir todas las obras consultadas realmente, citadas o no citadas directamente en el trabajo. La bibliografía debe hacerse con apellido y nombre del autor, título subrayado o en cursiva, ciudad donde se editó la obra (si es una edición segunda, tercera, cuarta, etc. debe consignarse), editorial, año de edición. Para quienes usan PC, en Word: <Fromato> <Párrafo> <Sangría especial> <Sangría francesa>. Esto permite una mejor visualización de los apellidos, que aparecen sin sangría.
Ej.
BRIGHT, John. La historia de Israel, 5ta. ed., trad. M. Villanueva, Bilbao: Descleé de Brouwer, 1970.
NEILL, Stephen. El anglicanismo, trad. José Luis Lana, Madrid: Iglesia Española Reformada Episcopal, 1986.
SOMOZA, Ana. Aprendiendo a enseñar la Biblia, 3ra. ed., Buenos Aires, Publicaciones Alianza, 1999.

Nota: en la bibliografía final no se consignan páginas de libros completos (solo las páginas de artículos de revistas o secciones de un libro de varios autores o con un compilador).

En el caso de las citas textuales, introducidas en el cuerpo de la monografía, debe procederse así:
Si la cita es menor a tres líneas, debe hacerse entre comillas, y hacer la llamada a nota al pie (o al final) al terminar las comillas.
Si la cita es mayor a tres líneas, debe hacerse así: dejar un espacio libre luego de la última palabra del autor de la monografía. Escribir la cita textual dejando un espacio de sangría desde el margen izquierdo. Al terminar la cita, hacer la llamada a la nota al pie (o al final) y dejar un espacio libre (una línea en blanco) para continuar con la redacción propia del autor de la monografía (Ud.).
En ambos casos, en la nota, consignar, en este orden: Nombre y Apellido del autor, título de la obra en cursivas o subrayado, ciudad, año de edición que se está citando, página de la que se extrae la cita textual.

Nota: observe que en el caso de la Bibliografía Final, el autor se escribe en orden “Apellido, Nombres”. No así en el caso de las notas al pie, donde se escribe “Nombre y Apellido”. Los datos bibliográficos deben citarse en el orden dado.


Por ejemplo:

Por su parte Bruno Secondin comenta:
Para muchos la palabra “espiritual” sigue evocando algo inmaterial, vitalista o, a lo sumo, experiencial – hecho de imaginación, simbología, metáforas y silencios, y sobre todo, de “rarezas” e histerismos-, que escapa a las exigencias de una racionalidad moderna. [1]

En el caso de una obra escrita por varios autores se puede utilizar la abreviatura AA.VV. (=autores varios). En el caso de obras compiladas por un autor, pero que incluyen artículos o capítulos de otros autores, se consigna, por ejemplo (en la nota al pie):
John Yoder (compilador), Textos escogidos de la reforma radical, Buenos Aires, La Aurora, 1976.

Si se citan artículos publicados en un libro compilado por otro autor, debe citarse así (en la nota al pie):
Thomas Müntzer, “Sermón ante los príncipes”, en John Yoder (compilador), Textos escogidos de la reforma radical, Buenos Aires, La Aurora, 1976, p. 97



Artículos publicados en revistas

Se debe citar Nombre y Apellido del autor, título del artículo entre comillas, en Título de la revista en cursiva, nro. de volumen (año entre paréntesis), página de la cita. Por ejemplo (en la nota  al pie):

José Míguez Bonino, “Las iglesias protestantes y evangélicas en América Latina y el Caribe: un ensayo interpretativo”, en Cuadernos de Teología XIV (1995), p. 29.

Nota: observe que no el título de la revista, el número de volumen y el año no van separados por comas.


            Op. cit. A fin de evitar la sobreabundancia de datos, cuando uno va a trabajar con una sola obra de un autor, en la primer cita debe hacer la cita completa (como en el ejemplo de la nota 1). Pero luego, en las citas subsiguientes de esa única obra con la que se trabajará en la monografía, puede escribirse (siguiendo el ejemplo):      
                          
                  Bruno Secondin, op. cit., p. 45 .

Citas de material de Internet.  El material citado de Internet se puede citar de dos maneras:

Alberto Roldán, art. “Cómo hacer una monografía”, extraído de http://www.fiet.com.ar/articulo/monografia_roldan.doc (recuperado el 4 de marzo de 2008, 16.35 hs.)

O bien

Alberto Roldán, http://www.fiet.com.ar/articulo/monografia_roldan.doc (recuperado el 4 de marzo de 2008, 16.35 hs.)


Op. cit. quiere decir “obra citada”, en abreviatura latina. En el caso que se trabajen dos (o más) obras del mismo autor, luego de la primer cita (donde se consignan todos los datos bibliográficos) puede citarse de manera abreviada: Bruno Secondin, Espiritualidad en diálogo, p. 9

Nota: nunca debe usarse op. cit. para un autor del que vamos citar más de una obra en la monografía, porque el lector no sabrá de cuál de las obras se trata.


            Ibíd. Otro modo de evitar la abundancia de datos es la utilización de la expresión Ibídem (abreviada generalmente por Ibíd o Ibid.). Se utiliza esta expresión cuando uno va a citar otro párrafo de la misma obra en una nota inmediatamente posterior. Entonces, quiere decir que se está trabajando la misma obra de la última cita, pero en una página distinta (si es en la misma página que la cita anterior, solo puede ponerse Ibíd., y en tal caso se entiende que es otro párrafo de la misma página citada previamente).

Nota: en la utilización de Ibíd. Hay que tener cuidado de no intercalar entre dos citas  previamente hechas una tercer cita nueva de otra obra, puesto que se corta la cadena de referencia del Ibíd.

Negritas o cursivas originales. Si la cita que uno hace textualmente tiene negritas, subrayado o cursivas, debe consignarse, luego de la indicación de página, “negritas originales”, “cursivas originales”, o “énfasis original”. También existe la posibilidad de que uno (como autor de la monografía) quiera dar énfasis a ciertas palabras de la cita. En tal caso, debe consignarse “énfasis nuestro”, “cursivas añadidas”, o palabras similares.

Nota: evitar la expresión “negritas del autor” o “cursivas del autor”, puesto que genera dudas; ¿qué autor, el del libro o el de la monografía?


9. ESCRIBIR LA MONOGRAFÍA
Con los datos recogidos y el bosquejo más o menos completo con sus divisiones y sub-divisiones, ahora hay que redactar el trabajo.

Algunos aspectos prácticos que hacen a la redacción son los siguientes:
9.1.1 Utilizar los términos exactos. Si hay dudas, consultar al diccionario.
9.1.2 Escribir en tercera persona es aconsejable, sobre todo cuando se escribe una tesis. Por ej.: En lugar de decir: “como resultado de la investigación que he realizado...” debiera decirse: “como resultado de la investigación que el autor ha realizado...”
9.1.3 Gramática y puntuación. Procurar que las oraciones sean completas, con sujeto y predicado y no frases aisladas. Procurar oraciones cortas. Evitar repeticiones innecesarias. Coordinar bien los tiempos verbales. Por ejemplo si estamos usando el pasado, no cambiar a tiempo presente en el mismo párrafo y viceversa. En cuanto a puntuación, colocar donde corresponden los puntos que dividen las oraciones. Si se cambia de párrafo se coloca punto y aparte. Las comas (,) se utilizan para separar una serie de cosas: ej. “El problema de esas iglesias radicaba en: conflictos, liderazgo y administración.” La conjunción se coloca antes del último término de la lista.
9.1.4 Evitar en la medida de lo posible la adjetivación. En monografías o tesis, el autor tiene que procurar ser objetivo y no tendencioso. Por lo tanto, debe evitar el uso indiscriminado de adjetivos. 8.1.5 Evitar el lenguaje ampuloso y afectado. Con esto se hace referencia a aquella tendencia de algunos escritores que abusan del pleonasmo y lenguaje muy rebuscado que lo torna ininteligible.

“No es propio de un trabajo científico o literario una prosa abigarrada, barroca o pomposa, salvo que se pretenda ocultar carencia de ideas o presentarse con pretensiones de genio. La redacción científica ha de guardar en su estilo un cierto ascetismo literario: debe ser llana, directa y precisa. Una monografía escrita en buen estilo reunirá las características de unidad, precisión, fluidez y concisión.” (Como redactar una monografía, Buenos Aires: Ed. Didacta, 1977, p. 47).   




FICHAS BIBLIOGRÁFICAS

1. CONCEPTO: Son elementos auxiliares, que permiten registrar datos de identificación del texto y del   
    contexto.
2. ASIENTO BIBLIOGRÁFICO: Son los datos que identifican a las unidades bibliográficas.
3. UNIDADES BIBLIOGRÁFICAS: Son los diversos textos escritos y publicados que nos permitirán
    realizar la consulta y el registro de datos del tema investigado.
    Consideramos unidades bibliográficas a: Textos, textos seriados, publicaciones periódicas, para cada el
    asiento bibliográfico o datos varían.

   
   

   
   
   

domingo, 24 de abril de 2011

LAS MOTIVACIONES


El cansancio y la fatiga en el estudio provienen muchas veces de una mala ventilación.
                                                           LAS MOTIVACIONES
1.       CONCEPTO: son los estímulos que mueven a la persona a realizar determinadas acciones y persistir en ellas para su culminación. Este término está relacionado con voluntad e interés. está constituida por todos los factores capaces de provocar, mantener y dirigir la conducta hacia un objetivo.
2.       MOTIVACIÓN Y CONDUCTA
a)     El comportamiento es causado. Es decir, existe una causa interna o externa que origina el comportamiento humano, producto de la influencia de la herencia y del medio ambiente.
      b)     El comportamiento es motivado. Los impulsos,       deseos, necesidades o tendencias, son los motivos del comportamiento.
c)      El comportamiento está orientado hacia objetivos. Existe una finalidad en todo comportamiento humano, dado que hay una causa que lo genera. La conducta siempre está dirigida hacia algún objetivo.

3.TIPOSDEMOTIVACIÓN:
                  a) Extrínseca o incentivación: los motivos proporcionan alguna clase de beneficio material. Se basa en satisfacer necesidades externas del estudiante. Para ello, otras personas (padres y profesores) le ofrecen incentivos, premios. Por ejemplo: dinero, una moto, un viaje, salir el fin de semana, etc. Los estímulos vienen desde fuera del estudiante. El móvil es externo al propio sujeto y viene a resultar que la actividad de estudiar se convierte en un medio para conseguir otros fines.

b) Intrínseca,  auto motivación: los motivos proporcionan una satisfacción personal. Los motivos se asientan sobre la responsabilidad de nuestro deber como personas libres, y se orientan hacia el logro de nuestra propia mejora . Se basa en satisfacer necesidades internas del estudiante. Es realizada por el propio estudiante, él se motiva a sí mismo. Como el móvil nace en el propio individuo la actividad, en este caso de estudiar, gusta por sí misma.
c) Trascendentes: Son las razones asentadas en la responsabilidad del ser social, sobre la expectativa del grupo familiar o social, constituirse en ejemplo, en paradigma, en dejar huella, en el cumplimiento adecuado de su rol frente a los demás.

Aplicación: Determina diez razones por las que estás estudiando, luego clasificalas según su tipo.

ORIENTACIONES PARA MEJORAR EL ESTUDIO


ORIENTACIONES PARA MEJORAR EN EL ESTUDIO
1.       ¿Qué significa estar en forma para el estudio?. Se refiere a un estado general de bienestar, en la dimensión física, emocional e intelectual; que permite al estudiante adecuados niveles de concentración asimilación y rendimiento educativo. Sugerimos para esto:
2.       CONSEJOS:
ALIMENTACIÓN: Sana, natural, priorizando los que favorecen el funcionamiento cerebral, ricos en silicio como
 El té de cebada, cocción  de cola de caballo, salvado ; ricos en fósforo como el pescado, en fosfato como harina de maíz, quesos, lácteos, etc.
SUEÑO Y DESCANSO: El sueño está vinculado a la capacidad de concentración de la mente. Por ello, si una persona no ha dormido la cantidad suficiente de horas, tendrá problemas en este sentido. Además, el sueño también está relacionado a otras capacidades, como la memoria.
                        RESPIRACIÓN Y RELAJACIÓN: Se recomienda                   practicar cada día una o dos sesiones de relajación de diez o quince minutos aproximadamente. Para favorecer la relajación antes de acostarse es bueno un baño de agua tibia pero no es aconsejable permanecer más de diez minutos dentro del agua.
El cansancio y la fatiga en el estudio provienen muchas veces de una mala ventilación. Para mejorar puedes realizar el siguiente ejercicio de respiración: Túmbate de espaldas con la nuca apoyada en el suelo, las rodillas flexionadas y los brazos extendidos a lo largo del cuerpo.
Cierra los ojos, entreabre la mandíbula y relaja la lengua y los labios. Concéntrate sólo en tu respiración durante tres o cuatro minutos. Inspira por la nariz lenta y profundamente contando hasta cinco. Contén la respiración tan sólo un segundo, y espira despacio por la nariz contando de nuevo hasta cinco.
FORTALECE TU CONCENTRACIÓN: la concentración eficaz se puede convertir en un hábito arraigado. Para adquirir este hábito beneficioso es importante establecer unas horas diarias en las que dedicas toda tu atención única y exclusivamente a estudiar. Recuerda, la concentración es un trabajo arduo, y la fatiga afectará a tu actuación. Si has estado concentrándote durante un período de hasta treinta minutos, bien puedes desear un pequeño descanso después de este tiempo de trabajo intensivo. Sin embargo, no caigas en el hábito de tomarte descansos demasiado largos. Simplemente ponerte de pie o estirarte durante uno o dos minutos puede ser suficiente. Después de tres o cuatro períodos de concentración de treinta minutos cada uno, te deberías tomar un descanso más largo, de unos diez o quince minutos.
USA TU IMAGINACIÓN: Procura hacer una asociación sistemática entre el tema de estudio y un asunto u objeto de tu vida que te  es familiar y muy conocido y te  interesa especialmente. Procura señalar las características, actividades, funciones, rasgos del objeto que tú conoces bien. A continuación por cada uno de los rasgos propuestos  del objeto conocido, intenta encontrar un paralelismo con características que te  imaginas que el otro objeto de estudio desconocido  podría  tener.
EJERCITA TU MEMORIA: El proceso de la buena memoria está constituido por cuatro etapas, que pueden ser llamadas:
Registrar: En esta fase adquirimos el contacto con los elementos que posteriormente memorizaremos. La información entra por los sentidos, siempre que se le brinde atención. Sería el caso, por ejemplo, de una primera lectura. Es muy importante saber que la memoria puede registrar mejor aquello que se recibe de una manera ordenada y lógica.
Retener:
Cuanta más atención prestemos a lo que intentemos memorizar, más fácil nos será retenerlo. Esta es una premisa básica dentro del proceso de la memorización. Por esta razón el interés y la motivación ante lo que estamos leyendo, viendo o escuchando, y pretendemos memorizar, es algo básico para los buenos o malos resultados en términos de recordación.
Asociar: La asociación es el vínculo o conexión entre la información que penetró y los datos almacenados en el cerebro. Cuantas más asociaciones (conexiones) haya, más fácil será entender y retener lo nuevo. Cuanto más se sepa, más fácil será, así, retener lo novedoso. Es más difícil retener algo que sea completamente novedoso, como sucede al iniciar una materia de la cual no se conoce ni el vocabulario. Rememorar: Aquí el cerebro “devuelve” los datos que le requerimos. Muchos de ellos permanecen en la “mente inconsciente” sin que nos percatemos de ellos, y sólo surgen en circunstancias especiales (eventos inesperados, estímulos o desafíos que activan los recuerdos). Esta es la etapa más importante, y la que a todos más nos interesa. El recordar aquello que hemos memorizado. Para ello, la manera de haberlo retenido (ordenado, con lógica, con esquemas e imágenes) va a ser fundamental.
         TOMA BUENOS APUNTES: ¿No sabes tomar apuntes? Empieza anotando la información que explique o escriba en la pizarra tu profesor durante la clase. Intenta hacer buena letra para que después entiendas tus apuntes. También es una buena idea tener los apuntes, exámenes, pruebas sorpresa y documentos de trabajo ordenados por asignaturas.

USA ESQUEMAS: La elaboración de diagramas visuales / organizadores gráficos, ayuda a los estudiantes a procesar, organizar, priorizar, retener y recordar nueva información, de manera que puedan integrarla significativamente a su base de conocimientos previos. Además, les permite identificar ideas erróneas y visualizar patrones e interrelaciones en la información; factores necesarios para la comprensión e interiorización profunda de conceptos.
ADMINISTRA  TU TIEMPO: Saber administrar el tiempo es muy importante, y una sugerencia que te puedo dar es hacer un horario de estudio, para la cual es necesario investigar cuanto tiempo necesitas dedicarle a cada materia; así como a las diferentes actividades que realizas durante el día:
  • Registra todas las actividades
  • Fija un tiempo para repasos
  • Fija tiempo para recesos
  • Fija tiempo para tareas
  • Forma metas semanales y semestrales, que puedas alcanzar.
  • Descansa de 5 a 10 minutos después de cada hora de estudio concentrado
  • Estudia todos los días un poco, esto facilita la retención
  • Estudia en lugares y horario fijos, esto te ayuda a formar hábitos de estudio.
  • Mantén un equilibrio entre dormir, comer, estudiar, trabajar y diversión.
AUTOEXAMÍNATE: Proponte luego de tus repasos diarios, de la realización de tus tareas, tus propios exámenes, para esto usa tu intuición, revisa los sílabos de cada materia y verás que tu trabajo  estudiantil da buenos resultados